Jujuy HD – Hace mucho tiempo que Jujuy no tenía una representante en los nacionales de box femenino, días atrás, Rocío Rollano fue noticia al levantar la medalla de plata, luego de varias contiendas duras arriba del ring; ahora suma 33 combates amateurs en su historial.
Antes tuvo que sortear un regional, donde se adjudicó el primer puesto en su categoría, 57 kilos. Aún sigue siendo amateur, pero el camino ya está marcado para que en poco tiempo, llegue al campo rentado.
Su entrenador Fabián Aramayo, destacó la importancia de participar en el nacional, luego de que su pupila, participará anteriormente en tres regionales. Eso le dio la confianza para poder enfrentar en la final a la bonaerense Milagro Herrera.
Antes de enfrentar a Milagro, tuvo que realizar dos combates. En la primera contienda enfrentó a la neuquina a la cual le ganó ampliamente por puntos, en la siguiente, le ganó a la representante de Santa Fe donde fue superior en los cuatro asaltos.
La final fue nada más y nada menos, con una integrante del seleccionado argentino, Milagro Herrera; la cual tiene más de 80 combates arriba del ring y roses internacionales.
A juicio de su entrenador, Fabián Aramayo, tuvo a la altura a la hora del combate y no hubo mucha diferencia entre ambas. “En el primer round, hizo sentir su mano y los integrantes del seleccionado, comenzaron a boxear desde afuera”.
Fabián sabía que al combatir con una púgil de estas categorías, iban “con dos puntos abajo”, pero eso no los acobardó a ambos y le dieron pelea a la bonaerense.
“Más allá de todo, llegar a la final es un orgullo, una felicidad enorme, es un sueño que Rocío anhelaba hace muchos años, volvió muy contenta”, admitió Fabián Aramayo.
Rocío no sintió el desgaste en el cuadrilátero ya que luego de la contienda en la final “se sentía entera” y no se le notó el cansancio. Por el lado de su rival, no quería ir al choque con la jujeña.
Ahora, la púgil de la escuela de box, “Chunay Boxing Club”, deberá seguir cumpliendo sus obligaciones en el curso de incendios forestales, para luego continuar con los entrenamientos y dentro de poco, cantar truco en el campo rentado.