Para Ismael fue una pelea muy áspera, muy difícil pero no imposible, en los tres rounds que duró, de 3×1. “Lo solucioné con los clinch, rodillas, lo que al él le favoreció fueron los codazos y un golpe ilegal, un cabezazo que me cortó el rostro”.
El retador de Ismael tiene muchas peleas de muay thai, semi profesional, y para Ismael era un duro escollo arriba del ring. “Me sentí siempre confiado por el entrenamiento que tengo con Francisco Sallent”.
El Dojo Puma no para, ya que el 21 de este mes, presentará en la quinta fecha de la Unión Jujeña de Kick Boxing (UJK) a sus alumnos. “Estamos hablando con Sallent para hacer un torneo amateur de muay thai a fin de año, tengo el apoyo, me siento contento de pertenecer a Spartans Muay Thai”.